Avanzando
Los días, las noches, semanas, meses...
Creemos dominar nuestro tiempo, nuestros espacios
Especulamos con el mañana, anhelamos el tiempo por venir
Nos sacude el pasado, con un crisol de sensaciones, recuerdos, vivencias únicas e irrepetibles,
Sabemos que mucho del pasado se hace presente en cada momento de distracción, cuando nos sumergimos en nuestro interior, cuando nuestras mentes juegan con las imágenes, los aromas, los sentimientos detenidos
Nos sabemos atados a la finitud; sin embargo, nuestras mentes nos engañan diciendo: será para mañana...
Cuando nubarrones y densas nieblas nos acosan, nos sacuden y atemorizan, los replanteos, la sensibilidad extrema y el encuentro con nuestro alma se reavivan. Nos interrogan, nos inquieren, nos proponen un nuevo amanecer: elegir legítimamente nuestro presente, anhelar con pasión el día de mañana...
Nos ayuda, entonces, a seguir avanzando en la inmensidad de nuestro camino de la vida...